rayadas de celda sus palabras
y sus acentos... graves de rejas
mas
algo de libertad hay en sus susurros:
esos
espacios abiertos entre barrotes
por
donde se cuelan algunos sonidos
y
recuerdos de un afuera para ella muerto
rayado
su alma
y
oxidadas resuenan sus carnes
ve
desde la cima de mil poemas
el
vuelo de los otros
y
confirma que
ajustada
a su talla es la mazmorra
¿quiénes
son esa celda
y
el encapuchado carcelero ?
nada
más que ella misma
y
lo inaudible de su voz
nada más y...
¡nada más!
¡nada más!
ana
lucía montoya rendón
enero
28 de 2015
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario