8. Intimidad

El mejor de los hombres es semejante al agua,
La cual beneficia a todas las cosas, sin ser contenida por ninguna,
Fluye por lugares que otros desdeñan,
Donde se acerca más deprisa al Tao.

Así, el sabio:
Donde mora, se acerca más deprisa a la tierra,
En el gobierno, se acerca más deprisa al orden,
Hablando, se acerca más deprisa a la verdad,
Haciendo tratos, se acerca más deprisa a los hombres,
Actuando, se acerca más deprisa a la oportunidad,
En el trabajo, se acerca más deprisa a lo competente,
En sentimientos, se acerca más deprisa al corazón;
No lucha, y así permanece libre de culpa.

Lao Tse

Tao Te Ching

.


sábado, 31 de enero de 2015

EN SERIO, EN SERIE




un molde
donde metidos todos
y olvidados de que cada paso es indeleble
hace que la raza por oleadas marche…

¡marche!

¡arre! ¡arre!

ana lucía montoya Rendón
enero 31, 2015

.

¡NO!



Tan sorda en las noches la roca

que solo puede seguir estelas de sombras



Tan sordas al tacto sus manos

enhebran vacíos en las lunas calvas



No diga que sufre o que goza

solo coma mordaza y suspire mordaza



Si sueña en la copa de un árbol

allí estará a menos que les grite ¡soy libre!



No diga jamás lo que piensa

y hermosa verán su boca cosida



Lengua cosida y mente suelta

son una mueca de locos-mudos y celdas



Cerremos los ojos de día

que de noche las voces dibujan y cuentan



Coronas en torre del rey

son flores blancas en tumbas calladas



No cuente verdades a nadie

que luego pregonarán que son volutas de humo



No diga

No sueñe

Sobre todo:

No piense... no piense... no piense
no piense... no piense... no piense



Ana Lucía Montoya Rendón

Enero 31, 2015



.

viernes, 30 de enero de 2015

¿POR QUÉ?




¡qué envidia!

y no de la que dicen buena

pues ya es infección crónica sentirla




qué envidia de vuelos y cantos

y del fluir de ríos

del vaivén de los mares

y la perspectiva del infinito



envidia de no poder entretejer mutismos y voces

y gritar silencios y sanar de olvido



envidia de no poder mirar desde las cuencas vacías

para observar cómo ven los ciegos desde sus almas

lo desnudo



y yo

que puedo gritar y ver

que podría

libre y contenta ir hasta el abismo

tengo colgada de mi cuello la desidia

—yo su perro fiel—

me agarro como fundamento

a un suelo que no es mío



yo

que podría ser canto

o nube

o gota de agua

me diluyo en naderías al hablar o al callar



y si nada de nada puedo

¿por qué se me ha permitido estar y ser?



ana lucía montoya Rendón

enero 30, 2015



.