8. Intimidad

El mejor de los hombres es semejante al agua,
La cual beneficia a todas las cosas, sin ser contenida por ninguna,
Fluye por lugares que otros desdeñan,
Donde se acerca más deprisa al Tao.

Así, el sabio:
Donde mora, se acerca más deprisa a la tierra,
En el gobierno, se acerca más deprisa al orden,
Hablando, se acerca más deprisa a la verdad,
Haciendo tratos, se acerca más deprisa a los hombres,
Actuando, se acerca más deprisa a la oportunidad,
En el trabajo, se acerca más deprisa a lo competente,
En sentimientos, se acerca más deprisa al corazón;
No lucha, y así permanece libre de culpa.

Lao Tse

Tao Te Ching

.


domingo, 3 de mayo de 2015

ARMAS Y DES-ARMAS









Dicen los que saben que, un arma es instrumento de defensa y, según está anotado en el diccionario, la lista es bastante larga; sin embargo podría decirse que armas las hay de muchas clases: de sonidos y carne, de sílabas mudas, de ojos abiertos o cerrados, de pecho desnudo, de noches de celo y sombras, de lecho o mesa compartidos… sí, también las hay de sal y dulce y tremendamente hospitalarias. Hay muchas, muchas más, todas fascinantes... Dan la posibilidad de convertir al Universo en un total “des-arme”. Esas, —mejor nombrarlas "des-armas"—, son el abrazo, el beso, la flor, el agua, el firmamento, el horizonte, el ocaso... Si no, ¿qué tal un enojo frente a la plenitud de la mar, o ante el clamor de un río correntoso, o de la lujuriosa gama de tonos de las zonas tórridas o la blancura de los glaciares? O, ¿Ante la belleza majestuosa de un felino adormilado o la atención plástica de su cuerpo al disponerse a cazar? Toda arma pierde su filo para convertirse en pluma y gozo, en caricia, en risa, en suspiro… en placidez. Des-armes así ablandan los corazones endurecidos y… “aflojan las piernas”.



Ana Lucía Montoya Rendón

Mayo 3, 2015



.

1 comentario:

RAJE dijo...

Toda arma pierde su filo para convertirse en pluma y gozo, en caricia, en risa, en suspiro… en placidez. Des-armes así ablandan los corazones duros y… “aflojan las piernas”. (Ana Lucia Montoya Rendon).

El mundo necesita que todas las armas que hacen daño pierdan su filo...

Bello ensayo Ana Lucia. Un beso